El seguimiento de los comportamientos en circulación permite comprender con mayor rapidez los cambios que pueden incidir en el aumento o la reducción de los accidentes de tráfico. Asimismo, facilita la evaluación de la efectividad de las medidas de educación, prevención y sanción implementadas para influir en las conductas que generan riesgos en la vía.
Para analizar su impacto, se consideran tres fuentes clave de información:
- Las condenas por delitos viales, registradas por el Ministerio de Justicia;
- El observatorio de velocidades y comportamientos en circulación – ONISR;
- Las encuestas sobre comportamientos declarados por los usuarios.